«Mi familia fue la inspiración de este caminar. Cuando supe de la presencia de parteras, hueseros y médicos en mi linaje, reconocidos y todos autodidactas, entendí la importancia de confiar en nuestra intuición y en la inteligencia que nos habita.

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Mi camino de buscadora encuentra los pasos Xanatl Barra cuya misión a sido transmitir la ciencia Maya Tolteca. Ella me legó las enseñanzas de los 13 Clanes Madre, vividas en un proceso de varias etapas. Realicé a su lado la práctica de las grutas -cuevas obscuras donde nos ofrendamos a través de la práctica de la recapitulación – y el arte de vivir andando con ligereza nuestro viaje por cada percepción. Mi peregrinación al lado de Xanatl me acercó también a la ceremonia maya del fuego y del cacao.

Como madre y guardiana de la energía femenina, llegué a la Danza de la Luna y el Camino Rojo. Allí mi corazón resuena con la Abuela Tonalmitl; es el camino de la ofrenda y del guerrero. Experimenté en un nuevo nivel el compromiso, la fuerza mental y de voluntad con las prácticas del ayuno, la búsqueda de visión, la danza y las peregrinaciones. Me inicié también a la medicina del tabaco a través de la ceremonia de la chanupa. Me nutre escuchar de las anécdotas de viaje en cada encuentro con los guardianes de la sabiduría de las Américas que tengo el honor de conocer.

Realizo a una gira anual entre Francia y las islas de Guadalupe compartiendo en círculos el legado ancestral en sus diferentes matices. En México llevo círculos terapéuticos de huevo yoni de obsidiana, círculos de mujeres, acompañamientos individuales y ceremonias de tabaco y cacao. Me especializo en el estudio de nuestra sagrada energía sexual

 

Soy además terapeuta corporal y transgeneracional..»